Cuando nos referimos a la mortandad perinatal hay que tener
en cuenta que es la principal pérdida de corderos en nuestros sistemas
ganaderos ovinos patagónicos. Las primeras 72 horas luego de haber nacido el
cordero es el momento más crítico para su supervivencia.
Es de importancia tener en cuenta este tipo de pérdidas para
ser eficientes dentro de los establecimientos, detectar las posibles causas y
soluciones alternativas. Distintos trabajos experimentales en Patagonia, estiman
valores de mortandad perinatal entre el 10% al 30% de los corderos nacidos
vivos, es un valor que no puede ser desestimado en el manejo de nuestras
majadas.
Una de las
principales causas son las condiciones climáticas desfavorables en el momento
de la parición de las ovejas; situaciones de frío intenso, lluvia, viento y/o
nieve, pueden provocar gran cantidad de mermas de corderos recién nacidos. Minimizar
estos factores climáticos adversos tratando de ejecutar en lo posible un manejo
de pariciones controladas en potreros chicos con reparos como cobertizos y la utilización
de cortinas rompe vientos son alternativas factibles a tener en cuenta. También
manejar la época del servicio teniendo en claro que el comienzo de la parición sea
a la salida del periodo invernal es una buena alternativa.
La alimentación de la oveja preñada en el último tercio de
la gestación es otro factor de gran importancia, una oveja con deficiencias
nutricionales en este periodo va a priorizar su vida antes que la de su cría,
muy posiblemente abandone el cordero. La oveja en esta etapa tiene altos
requerimientos alimenticios, es aconsejable adjudicarles los cuadros del campo
con mayor disponibilidad forrajera y de ser necesario planificar una
suplementación estratégica.
Cuando llega el momento de la parición en los sistemas
extensivos ovinos típicos de Patagonia tender a realizar manejos
semi-intensivos o intensivos, de ser posible, minimiza las muertes perinatales.
Los encierros programados, la observación y asistencia del parto son de gran
ayuda, la intervención se requiere en situaciones de partos múltiples o en borregas
de primera parición.
Tener en cuenta y abordar estas principales causas de
pérdidas de corderos en la parición, junto con otros problemas como los
depredadores y la sanidad general de la majada, van a contribuir a aumentar los
porcentajes de señalada y ayudar a que la ecuación económica cierre mejor.